19.5.11

Te vuelvo a elegir cada dia

Veremos como el sol se transforma en maldición, como cada rayo de luz nos golpea en los ojos, y nos calienta la mirada. Veremos como quienes creemos ser se transforma en quienes somos, en lo que hacemos, en lo que pensamos. Tendremos infinitas dudas, interminables conflictos. Pero cada día volveré a elegirte. Cada día haré canciones para distraernos, que hablen de vos, del sol, de las hojas de las plantas, y del olor a pino. Cada vez escribiré con mas ímpetu, y con mas decisión, poniéndole a cada letra un valor, a cada punto una sensacion, a cada coma un ardor de vida. Sentiremos girar al mundo con una mezcla de asombro y maravilla, como si fuera la primera vez, o como si fuera la ultima. Extrañamente ambos sabremos, sin decírnoslo, que de la mano todo es un poco mas simple, que de ahí surgen las ideas, que es desde aquel lugar apretadito entre dos manos distintas que se eligen donde parten los sueños, las creencias, los reyes, papa noel, y las hadas. Veremos como los días pasan solos, las horas tardan en llegar, lo complejo se convierte en simple y no queda nada por dudar. Veremos como las arrugas comienzan a surcas los rostros, el tuyo, el mio, nuestros reflejos. Veremos como se desencadena el mundo, como sigue la vida. Recordaremos como era la marcha que de a ratos íbamos en contramano, gritando como locos, yo, bailando desquisiada, vos retandome enojado. Y, aun sobre aquellos recuerdo lanzaremos sonrisas al aire que estallaran como fuegos artificiales, de esos que no hacen ruidos pero sorprenden con chispitas, y luces de colores. Cada día volveré a elegirte, y sera tan maravilloso. Cada vez con mas ganas te escribiré cartas que duren eternidades, que leas días enteros, que guardes en una caja, que olvides por un tiempo, que luego las encuentres cuando estés buscando otra cosa, y las releas, y te emociones de nuevo, y las vuelvas a guardar, pero ahora con mayor emoción. Cartas que al volver a esconderlas te roben una sonrisa y te hagan tropezar conmigo, con mis recuerdos, con la juventud y nuestras tardes. Cartas que te hagan sentir amado y eterno.

1.5.11

The long and winding road



Un largo y sinuoso recorrido desde aquel ultimo adiós, hasta esta grandiosa bienvenida. Estaciones que se fueron, el sol que se fundía con la arena, las hojas color sepia en el piso, el gris frió, las flores que pintaban los atardeceres, y de nuevo el sol que se fundía... Y, así pasaban mis días, mirando los cambios que aquí ocurrían sin encontrarle un sentido a tal movimiento, sin prestarle atención al tiempo. Y, así me fui sometiendo al ataque de los momentos, con la guardia baja, con el corazón abierto, con la mente cerrada, con mis propios brazos abrazándome, pues no había mas que eso. Eso era lo que dejaba, lo que me abandonaba, lo que había perdido. Sin querer pensar en eso me fui estancando en un intento pero no resultaba. Me lastimaban los sonidos, me abrumaban los recuerdo, me entristecían los silencios, y no había mucho mas. Las melodías conocidas se fueron alejando de mi vida ya que traían el pasado al presente, ya que desenpolvaban las memorias, pero el baúl ya lo había cerrado y no había mirado atrás; me había ido sin saludar, sin el ultimo beso, sin dejar de llorar; El adiós era definitivo aunque claro no estaba, y así fue. Con el paso del tiempo se fue impregnando muy adentro el aprendizaje, lo mas útil que se podía rescatar de lo poco que quedaba en pie aun.

Mirando atrás seguro encontrare caras conocidas sonriendome, saludándome, felicitándome; veré como nada era tan grave y las heridas se curan con el tiempo.

Hoy, el baile que me regalan tus caricias, el sueño largo de tus besos, la fragancia secreta que escondes, tus nuevas ideas para sentir, las emociones que provocan tus sonrisas, son la seguridad de estar en el lugar correcto, de pertenecer a estos momentos, de suplantar las memorias hostiles por los nuevos recuerdos, esos que en el futuro tal vez se conviertan en lo mismo de antes ¡quien sabe! La vida es un gran circulo perverso. ¡Que maravilla!