Todavía, Camila todavía recordaba los acordes, y las tardes.
Mirarte era como bailar. No se como decirte que todavía no, todavía no
te olvido, y mientras lo intento el día se me hace largo, y la soledad me ataca
de vez en cuando y no sabré que hacer cuando salga de este circulo y me
encuentre sin vos. Mientras pretendo que nada importa, mientras juego a ser la
fuerte. Y cada día me sigue matando, y la ausencia no me deja en paz, y me
caigo y me levanto. Asique te sigo mirando porque el mirarte me hace mal pero
me mantiene. Perduro por puro dolor, perduro por pura esperanza. Mientras me
hago a la idea de que no estas.
Eras como la melodía mejor, como la navidad misma. Eras como un
don, como el talento, como algo que me hacia especial. Como un sueño, como una ilusión.
Como las letras de la poesía que jamás escribí. Eras como los vinos añejos que
cada día son más bellos. Eras como un recuerdo que se fortalecía en mi mente.
Como la vida que se me fue robada, como las estrellas cuando son alcanzadas. Si
pudiera elegir entre el mundo y tu canción me quedo con vos, y que el día sea
eterno.
Solo sombras, solo frio solo invierno, soledad cuando tu mirada se fue
de mí, se despidió y me dejo solo la bufanda para seguir. Solo como una
tormenta de verano, que llega sin avisar, te encierra con toda su potencia, y
se va dejando atrás hojas caídas y ojos mojados. Un abandono y un ardor en la
garganta.
Hay cosas que no se aprecian mientras son cotidianas: había mañanas en
las que no quería despertarme, había tardes en las que no quería escaparme, había
noches en las que no quería atenderte. Había te quieros que me guarde para siempre, y te amos que deje en un bolsillo. Había
rutinas que me aburrían, como contarte lo que hice hoy, como abrazarte, como
mirarte y no llorar. Había canciones que no me lastimaban, había lugares que no
me desgarraban, había palabras que no me provocaban miedo. Estabas vos.
Tus espacios no están llenos aun. Donde encontrar quien pudiera remplazar
tanto. Me asfixian los pensamientos y la certeza de que aunque quiera los
pasados nunca vuelven, las horas siguen pasando, nadie se detiene, ni siquiera
vos. Me canse de esperar que a la vuelta de un recuerdo aparezcas en la
realidad. Me canse de soñar y despertar.
Te extraño, te lloro. El día estuvo mal: hoy te soñé. Cada vez que
pienso en vos quiero volver. Detesto no saber si te acordas de mi o no te
importa nada de lo que me pasa. Termino los días cansada de extrañarte.
"Camila borro los recuerdos de aquella noche. Borro los silencios estúpidos,
anulo las palabras inconvenientes, borro, borro y borro. Borro tu cara decepcionada, borro la imagen del contorno de tu espalda al irte sin mirar atrás.
Borro borro. Camila olvido todo esto, y hoy anda confundida por la ausencia, por el dolor en el pecho, por el nudo en la garganta por los ojos que
gotean. Camila entendió que lo mejor que podía hacer con toda su melancolía, y
con las nostalgias que la atacaban, era volcarlas en palabras, descargarse y
pedir perdón. Escribió cuentos para pedir disculpas, cuentos para describir
miradas, cuentos para valorar, cuentos para mejorar, cuentos para recordar y
cuentos para olvidar. Escribió canciones para vos, canciones para mi, canciones
para ella, canciones para su dolor, canciones para la alegría pasada, canciones
para la frustración y para la resignación. Cuentos agridulces, cuentos mojados
y cuentos secos. Cuentos de superación y canciones de dolor. Camila describió
momentos, aclaro pensamientos, plasmo sentimientos. Escribió la vida y cuando
se canso lloro."
Y entonces Simba le hizo cupcakes y Camila fue feliz llenandose la panza.
ResponderEliminarMe gusta lo que escribís, pero no el por qué.
La inspiracion, por lo menos en mi caso, siempre es angustiosa.
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